En muchas ocasiones hablamos sobre el impacto medio ambiental que supone la obsolescencia programada en nuestra planeta. Y aún sabiendo que no estamos capacitados para absorber la magnitud de desechos electrónicos que producimos y en un plazo de tiempo corto tiramos, seguimos adelante con una actividad la cuál es incapaz de ser absorbida por las plantas de reciclaje.

A pesar de tener una legislación internacional que prohíbe enviar desechos electrónicos al Tercer Mundo, hasta allí llegan en forma de donación a ONGs, pero más del 80% de los residuos son inservibles.

Mike Anane, es un activista medioambiental y periodista residente en Ghana, que muestra cómo en su país los aparatos electrónicos occidentales se apilan en vertederos. Anane los almacena con una etiqueta que indica su procedencia: ejércitos, hospitales, empresas… del Primer Mundo creando una base de datos con etiquetas y contactos de todas las empresas que mandan los residuos tecnológicos a Ghana, para poder así denunciar a todas estas empresas.

Mike Anane lleva años luchando por demostrar tal atrocidad.

Pero a lo largo de kilómetros y kilómetros, nuestra basura electrónica campa a sus anchas convirtiéndose así en el paisaje natural en el que conviven cientos de familias. Inhalando día tras día el humo que genera la quema de tales productos. Los niños dejan de tener infancia para pasar sus días entre basura y con graves problemas de salud.

Hoy os queremos compartir un video creado por la televisión australiana en el que Mike Anane denuncia la barbarie que sufre su país. Quizás de esta manera podamos llegar a ser conscientes de cada uno de nuestros actos qué tipo de consecuencias tienen.